Cuando era pequeña todas las mañanas al vestirme le pedía a mi madre que me pusiera un vestido que bailase. Entonces yo giraba sobre mi misma y, para mi fustración, la falda no se abría y subía como pasaba con el vestido de sevillana. XD
Aquí llegaba mi pataleta:
¡ESTE VESTIDO NO BAILA!
En fin, pobre de mi madre que no sabía que los vestidos que bailan tienen que ser de lunares :P
Mirilustra (Miriam Rodríguez)